Si bien la frase le dio pie para decir que "Cristina le toca siempre el culo a Alberto", la idea de poner una foto del presidente chileno Gabriel Boric y Alberto Fernández abrazados para decir que el mandatario trasandino "le tocó el culo" al presidente argentino es un exceso de forzar la crítica hasta el límite 

Pero Viviana Canosa se mueve cómoda en ese espacio donde el insulto y la crítica no tienen sustento en situaciones reales sino en la propia imaginación de la blonda conductora.

Lo llamativo es ver cómo convenció a la producción del programa de que ese segmento valía la pena como para ponerlo al aire sin que nadie le dijera: "Vivi, no da".