Este jueves no intervino el Banco Central y la divida volvió a escalar $ 1,48 y llegó hasta $ 28,21, según el promedio de ámbito.com.

Con el conocimiento de la letra chica del préstamo, de cara a una abultada licitación de Lebac, todo es incertidumbre. Sin embargo, la expectativa, según indica el mismo medio, es que el gestor de índices MSCI de incorpore al país a su referente de mercados emergentes.

"El acuerdo (FMI) si bien permite flotación administrada del tipo de cambio, difícilmente el FMI acepte utilizar reservas ante eventuales corridas. El dólar deberá flotar en contextos de turbulencias, para asegurar el repago de la deuda incluso en los peores momentos", estimó la consultora Econométrica.

En tanto, el economista Gustavo Ber afirmó a este medio que la suba se da "producto de la demanda acelerada que no encuentra oferta privada". No obstante, consideró que además de la confusión que genera el accionar de la autoridad monetaria, no debería descartarse que un tipo de cambio más alto sea también "una decisión post acuerdo con el FMI", según textuales del mismo sitio. 

En ese contexto, agregó que no habría que descartar un proceso de "overshooting" (implica que la divisa suba más de lo necesario para bajar posteriormente a un nuevo equilibrio) logrando que la demanda se frene sola.