"Nosotros estamos muy preocupados, somos los primeros interesados en que se inicien las clases, pero sí, obviamente, queremos que se respeten nuestros derechos", dijo la docente de Suteba, que tenía volantes en la mano. 

Y agregó: "Necesitamos sentarnos en una mesa de diálogo para así definir no solo las cuestiones laborales sino también las cuestiones que tienen que ver con condiciones de trabajo y salud laboral".

La gobernadora, casi sin mirarla, respondió: "Y que los chicos aprendan, ¿no? Es todo". Y acto seguido le sacó a la docente de las manos el volante.