Ríos de tinta se escribieron en Argentina en contra de todas las políticas del kirchnerismo que buscan hacer acuerdos con China y romper de esta manera con la dependencia de Estados Unidos y Europa.

Pero claro, bien cómodo quedaba a los intereses políticos maniqueos señalara estas alianzas como un giro comunista o fantasmas del estilo.

Lo cierto es que el propio Jorge Faurie, excanciller del gobierno de Mauricio Macri reconoció la importancia de hacer acuerdos con el gigante asiático.

Pese a las operaciones de los medios hegemónicos, la única verdad es la realidad. Y en este caso, la realidad es que la política internacional que llevó adelante el gobierno de Cristina Kirchner, no sólo es posible, sino que que es una posición visionaria en un mundo cambiante.