Mientras se espera que se termine de confirmar el acuerdo con el Fondo y que el dinero empiece a llegar a las arcas del Banco Central, Eugenio Casielles abrió una serie de incógnitas que, al menos, deberían generar incertidumbre.

Como buen libertario, Casielles no está de acuerdo en endeudarse con el organismo de crédito internacional pero a pesar de la aprobación del Congreso al “acuerdo” lo cierto es que todavía hay muchas preguntas sin responder.

Por ejemplo, se desconoce qué monto de lo que supuestamente recibirá el país es de libre disponibilidad y en ese caso, para qué se utilizará ese dinero. Si bien los expertos aseguran que el único fin de ese dinero es mantener el precio ficticio del dólar, ni siquiera eso fue confirmado por el Gobierno. Tal vez por vergüenza, claro.

Otro punto no menos oscuro es qué le está dando el Gobierno al Fondo para conseguir esos dólares ya que no se devaluó, que era el primer pedido, ni se salió del cepo y claramente es imposible dar garantías de reservas cuando todos los días se gastan miles de millones para que no se escape el dólar.