La nota que dio Mauricio Macri al diario La Nación pinta lo que representa su figura en el ámbito político, y el pueblo trabajador sabe muy bien que no serán los más beneficiados en el supuesto caso de que se instalara en el poder.

El líder del PRO prometió acabar con "los curros que han inventado" en estos años con los derechos humanos, agrupando en una bolsa de residuos logros tan importantes como la recuperación de identidades de bebés robados, el juzgamiento de militares o la generación del pensamiento sobre lo que representaba aquel gobierno de facto, tan ligado al sector empresarial.

Este martes, las críticas para el nuevo socio de Elisa Carrió apuntaron a sus "incongruencias" y a la preocupante negación hacia el fortalecimiento de la democracia, a través del fomento de la memoria.

El legislador Juan Cabandié acusó al líder del PRO de "atentar contra los valores y pilares democráticos. Decir eso en la Argentina es una atrocidad porque somos reconocidos en el mundo por nuestra lucha en Derechos Humanos y por las políticas de Estado de estos once años".

“Lo que propondrá Macri si tenemos la mala suerte de que dirija la nación es el olvido y el pacto de la impunidad”, agregó Cabandié antes de advertir lo contradictorio de su discurso: "Después felicita a Estela por Twitter, ¿cómo se compatibiliza eso con estas declaraciones?”.

Por su parte la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, prefirió no opinar, aunque dejó en claro que la ciudadanía es la que debe responderle en las urnas: "Con que la ciudadanía lea o escuche a este señor, ya es suficiente para ver qué pasa".

Por su parte, el secretario general de Libres del Sur, integrante del Frente Amplio Unen, Humberto Tumini, afirmó que "el nuevo socio de Carrió nunca ​condenó las atrocidades de la dictadura, no tuvo palabra alguna pidiendo la devolución de los niños y niñas que robaron los militares y estuvo muy de acuerdo con el indulto a Videla y compañía en los años 90".