"Para salir de la pobreza hay que crear empleos. La asistencia tiene un límite. Hay que generar producción, trabajo, crecimiento, y eso requiere inversión y no solamente de afuera", explicó Arancedo, al concluir la primera asamblea plenaria del año, en la que 108 obispos pasaron revista a la situación del país.

"Evidentemente, hubo ajustes" evaluó Arancedo, según reproduce la Agencia Telam, en relación a los resultados del informe de UCA que arrojaron el crecimiento de la pobreza en más de un millón de personas durante el primer trimestre del año.

El titular del Episcopado respaldó las mediciones de la Universidad Católica Argentina (UCA), que evaluó un repentino crecimiento de la pobreza en los primeros tres meses del año, frente a la sorpresa del Gobierno, que no reaccionó, como ocurría con frecuencia en la etapa anterior. "Hoy la pobreza ronda el 32% y no hay que asustarse del trabajo de la UCA. Hay que mostrar la realidad y asumir conductas y comportamientos para superar la pobreza. Eso nos compromete a todos", resumió.

Cuando fue consultado desde el Diario La Nación, por el escándalo de los Panamá Papers y el acuerdo con los fondos Buitres, expresó: "La economía real no puede quedar supeditada a un juego financiero. Debe estar siempre supeditada a lo político. No debe atentar contra el desarrollo y el crecimiento".

"Hay que generar producción, empleos, crecimiento, y eso requiere inversión y no solamente esperar de afuera", analizó Arancedo y ente sentido, afirmó que "para salir de la pobreza hay que crear empleos. Las ayudas de coyuntura son relativas, la asistencia tiene un límite".