La estrategia del Gobierno tras la represión que ordenó el miércoles pasado para que no pueda realizarse la marcha de jubilados con apoyo de hinchas, es clara. Victimizarse y responsabilizar a otros de los hechos de violencia sucedidos en el Congreso, a pesar de las evidencias de que hubo infiltrados que generar incidentes

El propio presidente Javier Milei provocó con sus declaraciones posteriores al justificar la violencia de la policía, Patricia Bullrich presentó una Ley "antibarras", y este lunes en La Nación+ con Cristina Pérez, Guillermo Francos intentó acusar a Cristina Kirchner de estar detrás de la marcha. 

Pero enseguida admitió que no tiene “una prueba concreta de que ella haya dado la orden de salir a marchar de manera violenta”

El jefe de Gabinete ya le había echado la culpa al mismísimo Pablo Grillo -fotógrafo que pelea por su vida- por estar en un lugar inadecuado