Luego del papelón del recuento de votos en la provincia de Buenos Aires en las PASO, que obligó a Cristina Fernández de Kirchner a tener que esperar hasta la madruga para que los resultados oficiales reflejaran lo que indicaban las mesas testigo y sondeos del distrito más poblado del país, la exmandataria envió un mensaje a la ciudadanía: 

"Perdieron el plebiscito sobre el ajuste, y pretenden manipular el resultado electoral.


Nos hemos enfrentado a un poder político que no solo controla el poder nacional, sino el provincial y el de la Ciudad de Buenos Aires.


Un nivel de concentración extraordinario e inédito, que cuenta, además, con el apoyo de todos los centros de poder económico, mediático y judicial; y con una inversión publicitaria desmedida, casi obscena. Un Gobierno con la suma del Poder Público. La desproporción de fuerza fue, y es, muy desigual y abrumadora. Pero la democracia argentina ha sido más fuerte que el miedo y la concentración de recursos y de poder. El Gobierno planteó un plebiscito sobre el ajuste, y lo perdió: dos de cada tres argentinos les han dicho que no. Que así no se puede seguir. Y ayer por la noche vivimos un hecho inaudito, insólito, vergonzante de manipulación política: intentaron ocultar la verdad, pero no van a poder. Unidad Ciudadana va a defender los derechos de la mayoría, y el primer derecho es el del voto. No vamos a parar hasta que se cuenten todos los votos, porque sabemos que hemos ganado. Cada voto cuenta, cada voto es parte de la soberanía popular. Y por un voto se puede decidir un legislador más o menos para defender a los ciudadanos de este ajuste insensible e injusto. Un legislador cuenta, porque es, por ejemplo, un voto más o un voto menos para el ajuste jubilatorio o para la flexibilización laboral. Esta misma tarde, nuestros representantes van a hacer una conferencia de prensa para comunicar todas las acciones políticas y judiciales que vamos a emprender para que la voluntad democrática sea reconocida y aceptada.


Durante todo este proceso de campaña ha ocurrido algo fundamental y que esta noche pasada se ha confirmado:
Primero, hemos logrado la creación de un espacio político para articular una sólida mayoría alternativa al ajuste de este Gobierno. Unidad Ciudadana: Un espacio político que hace 60 días no teníamos y que hoy, tiene la capacidad de competir contra la marca política más conocida y poderosa de la Argentina.


Segundo, hemos desarrollado una capacidad propia de comunicación. Con un estilo basado en escuchar a los ciudadanos y conversar con ellos.


Nos enfrentábamos a una extraordinaria presión publicitaria y política sobre la agenda pública y publicada sobre la cual el Gobierno tiene casi el control absoluto. Sin embargo, con escasos recursos y una campaña austera –la más austera de todas-, hemos construido una nueva forma de comunicación con capacidad propia para conectar con la ciudadanía. Para nosotros, el trabajo en redes no es extensión publicitaria, al contrario. Es una manera nueva de comunicarnos y hacer política desde la proximidad.


Tercero, hemos roto prejuicios y clichés negativos sobre nuestros líderes y candidatos, y hemos aprendido de nuestros errores. Hay un renovado equipo de voces nuevas y diversas. Hoy me siento comprometida con esta manera de hacer política. Estoy viviendo con pasión esta oportunidad para ser una mejor servidora pública y política.


Cuarto, y este es, sin dudas, el punto más importante: hemos ganado el marco y el contenido del debate electoral. Nadie lo niega. Hemos recuperado la voz de los ciudadanos en la construcción de la agenda política. Su voz es nuestra voz. Sus problemas son nuestros problemas. Hoy el debate es el económico. El que más importa porque es el que más afecta a la mayoría de los ciudadanos. Hoy todo el mundo habla de cómo frenar y poner un límite al Gobierno de Macri. Y nos alegramos de ello. Hemos recuperado para el debate político los problemas de la vida cotidiana de la ciudadanía: trabajo, comida, tarifas y medicamentos. La dignidad ciudadana, por fin, en el centro del debate.


Finalmente, ahora solo nos queda esperar el escrutinio electoral definitivo. Podrán retrasar la carga de datos, podrán manipular de manera chicanera y tramposa la realidad, podrán alargar este escándalo 20 días más hasta el resultado definitivo, querrán crear una realidad paralela en los medios, buscarán ocultar, maquillar, distraer y confundir. Pero no van a poder. La democracia argentina es más fuerte que su manipulación y su arrogancia. Vamos a desenmascarar este ejercicio obsceno de distorsión, esta patética actuación en el prime time televisivo. Vamos a defender el voto y la democracia. Quieren confundir todo para tapar lo que pasó ayer: dos de cada tres argentinos les han dicho que no a su ajuste y a su plebiscito.


Ciudadanos y ciudadanas, creemos que hemos creado las condiciones para crear una alternativa política al ajuste y por esa responsabilidad hoy estamos acá. Apelamos a todos los ciudadanos y ciudadanas que no están de acuerdo con este ajuste insensible, a unir esfuerzos y voluntades para poner un límite al Gobierno de Macri. Esto es lo que han dicho la mayoría de la ciudadanía a través de su voto y ahora nos toca a todos los dirigentes políticos cumplir ese mandato.


Hoy podemos crecer y salir al encuentro de una mayoría social que espera una mayoría política y electoral que los represente y los defienda. Lo haremos con la mano abierta y con responsabilidad. La ciudadanía ha pedido cambiar el rumbo económico y seremos leales a este mandato democrático."