De un lado con organizaciones como CTEP, Octubres y Somos Barrios de Pie, que respaldan las negociaciones del Gobierno, y, del otro, espacios como el Frente Popular Darío Santillán y el Polo Obrero, con posturas críticas.

"El FMI reconoce hoy la posición de Argentina: la deuda es insostenible. (Mauricio) Macri la tomó y despilfarró pero fue el Fondo quien la concedió y convalidó su destino espurio para tener a Argentina agarrada por 100 años. No hay FMI con rostro humano. Auditemos la deuda e investiguemos la fuga", aseveró hoy Juan Grabois, dirigente del Frente Patria Grande y referente de la Confederación de los Trabajadores de la Economía Popular (Ctep), a través de la red social Twitter.

De esta forma, se refirió al comunicado emitido ayer por el Fondo Monetario Internacional (FMI), en el que aseguró que la deuda pública argentina "no es sostenible" y que el superávit fiscal necesario para enfrentar su pago "no es económica ni políticamente factible", y reclamó una "apreciable" quita a los acreedores privados.

En la misma línea, Daniel Menéndez, referente nacional del Movimiento Somos Barrios de Pie y funcionario del Ministerio de Desarrollo Social, destacó -en declaraciones a Télam- que "la firmeza con que el Gobierno Nacional está llevando adelante la negociación está empezando a mostrar resultados positivos".

En tanto, desde una postura crítica, el dirigente del Polo Obrero (PO) Eduardo Belliboni dijo que el FMI "le dice al Gobierno y a los bonitas privados que es necesaria una quita para cerrar un acuerdo, pero lo hace para garantizar el pago de la totalidad de su deuda, mientras tanto acuerda con Alberto Fernández más ajuste como el reciente a los jubilados".

En un sentido similar, Dina Sánchez, vocera del Frente Popular Darío Santillán (FPDS) señaló a Télam que "lo importante ahora es resolver la gravísima situación de hambre y pobreza que vivimos como pueblo, en la que nos sumergieron las políticas macristas".

Por su parte, el presidente de la Federación de los Trabajadores de la Economía Social (Fetraes), Eduardo Montes, sostuvo que "la prioridad siempre son los acreedores, y la deuda es con el pueblo, con las Pymes y con el movimiento obrero, las empresas recuperadas y desocupados".

Por otro lado, el secretario general de la Corriente Nacional Martin Fierro, Nahuel Beibe, celebró la postura del Gobierno en relación al tema de la deuda: "Que el FMI diga que los bonistas deben aceptar una quita importante es un triunfo de la posición soberana del gobierno, de la decisión del presidente Alberto Fernández de no pagar la deuda con el hambre del pueblo y de la enorme movilización nacional que hicimos las organizaciones populares".

Del mismo modo, desde el Movimiento Octubres, su titular, Gastón Harispe, afirmó a Télam: "El FMI reconoció la imposibilidad de pagar la deuda argentina, a la vez que desnudó la naturaleza de la fuga de divisas durante el macrismo" y llamó a "poner en marcha acuerdos nacionales entorno de la producción frente a la especulación financiera y castigar la fuga de capitales".

En tanto, desde la Corriente Clasista y Combativa (CCC), el referente Freddy Mariño dijo que la deuda es "odiosa y catastrófica para los intereses del pueblo argentino y para los intereses de la Nación", y, por eso, llamó a "investigarla a fondo y enjuiciar a sus responsables".

El titular de la organización Los Pibes e integrante de la la Unión de Trabajadores de la Economía Popular, Angel "Lito" Borello, dijo, en tanto, que "las declaraciones que se tengan para con el Fondo van a ser sustanciales para poner en blanco sobre negro y poder dirimir: Patria o Fondo Monetario".


A esas voces se sumó también la del secretario general del Movimiento Territorial Liberación (MTL), Alberto Ibarra, que afirmó que, "frente a la corresponsabilidad del FMI en alimentar la bicicleta financiera con el fin de fugar capitales de la Argentina, corresponde exigir una quita importante en el capital e intereses de la deuda que permitan el crecimiento argentino a largo plazo".