Como se sabe, Oscar Centeno aceptó el ofrecimiento del fiscal Carlos Stornelli de integrar el programa de “imputado colaborador”, y así declaró el jueves ser autor de los cuadernos que sirvieron al juez Claudio Bonadio para desatar un megaoperativo y al Grupo Clarín una megaoperación.

Sin embargo, como encima no hallaron los cuadernos originales –recuérdese que hasta ahora se manejan con fotocopias–, el magistrado no aceptó aún considerar como "arrepentido" al chofer del exfuncionario Roberto Baratta, hoy detenido.

Bonadio tampoco le concedió la excarcelación solicitada y acordada con el fiscal y no se descarta que vuelva a ser indagado en las próximas horas, según sostiene el insospechable Clarín.

Sin la homologación, en concreto, Centeno sigue preso y apareciendo en la causa como imputado y, como se dijo, el mencionado diario no descarta que nuevamente lo cite a declaración indagatoria en Comodoro Py.

Evidentemente, los cuadernos originales no aparecen y tampoco alcanzan para sostener la megaoperación con que Bonadio y el Gobierno buscan neutralizar a la oposición encabezada por Cristina Fernández de Kirchner. Se sabe: la quieren presa a cualquier costo.

Por esa razón, que el juez no haya aceptado todavía considerarlo “arrepentido” a Centeno, aparece más como medio para presionar a este testigo-imputado que sostiene toda la causa; es decir, que aporte más datos o que, eventualmente, los invente…