De cara a las internas del FpV en la que se presentaron 7 candidatos, la dirigente de Nuevo Encuentro aseguró que "todos sabemos que hay en realidad una lista oficial, si se quiere, que es en la que competimos con Mariano Recalde para ver quién de los dos representa mejor al kirchnerismo y queda posicionado para dar la batalla de verdad que es ganar la ciudad de Buenos Aires".

Esa lista "oficial", también cuenta con el ministro de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, Carlos Tomada, como primer candidato a legislador porteño.

En una entrevista a Página 12, la candidata de Sabbatella aclaró que, si bien "no está hecho explícitamente", con Recalde podría haber un acuerdo para que "si gano, Mariano sea mi candidato a vicejefe y sería un honor si gana él que yo sea su candidata a vicejefa". Por lo pronto, entre ellos lo importante es que la fórmula sea "pingüino o pingüina".

Esta conjunción "tiene que ver con que ninguno de los dos muestra variantes respecto de la centralidad del proyecto nacional y del liderazgo de Cristina Kirchner. Lo que tenemos son diferentes miradas que tal vez en una fórmula conjunta pueden complementarse", agregó Cerruti.

En referencia a la competencia por la jefatura de la Ciudad, cuestionó "la prepotencia que tiene el PRO para usar los colores del gobierno para la campaña del partido". Porque, además, "hubo fallos del Tribunal Superior diciendo que no se puede" y en la legislatura "votamos una ley diciendo que no se puede usar el mismo color, pero Macri la vetó". "Después hablan de República, pero la verdad es que dejan bastante que desear", sentenció.

"En la ciudad de Buenos Aires se gasta el doble en publicidad oficial por habitante de los que gasta el gobierno nacional, contando incluso Fútbol para Todos y la Anses. También hay que sumarle que el PRO hace convenios con las provincias para donar una garita de colectivos o ambulancias a municipalidades del interior, que son todas operaciones para que vaya Macri y firme un acuerdo. Es decir, la campaña presidencial de Macri no la están bancando los empresarios que cenaron la otra noche con él, sino el pueblo de la ciudad de Buenos Aires", concluyó.