El presidente del Senado Amado Boudou defendió la oferta hecha ante la Corte de Nueva York: “Para los que confiaron en la Argentina, vamos a cumplir con los compromisos en el contexto que sea.

Para los que advierten que el default técnico es preocupante, Boudou opinó que sería un “bloqueo a la capacidad de pago de nuestro país y no vamos a dejar que acorralen a un país que está decidido a no endeudarse”.

Hernan lorenzino explicó cuál es el punto de vista de los opinólogos que acusan de insuficiente el ofrecimiento: “ellos ponen las leyes del mercado por encima de las normas soberanas de un país”.

“Estaríamos defraudando al 93 por ciento de los acreedores que aceptaron el canje si le ofreciéramos más ahora a los buitres y les otorgaríamos el derecho a reclamar por ese trato distinto”, afirmó Lorenzino sobre el 7 por ciento que no aceptó el canje de 2003.

Los funcionarios quisieron situar a la Argentina en el contexto internacional: “Los problemas de la economía mundial son las burbujas financieras, pero nuestro país está en el otro camino, ya que el gobierno tiene una situación muy cómoda”

En cuanto al malestar generado por los medios monopólicos sobre la cuestión del dólar, el vicepresidente insistió en que “no tiene impacto en la economía real”.“La Argentina es un proyecto colectivo y el sector financiero tiene que entenderlo”, sostuvo frente a la presión.

Además, se preguntó: “Me gustaría ver la estadística de salida de dólares de este fin de semana”.

El ministro Lorenzino también entró en los detalles de los beneficios que otorgará la Supercard: “La idea es beneficiar a los consumidores, no a un sólo sector de la cadena”.

“Al crear un instrumento de costo menor, la gente se pasará a esas herramientas y los que cobran demás deberán ajustarse”, manifestó Lorenzino sobre los empresarios supermercadistas.