Mientras de la boca para afuera el macrismo milita y exige el ajuste en todos los planos de la economía argentina, con tarifazos, despidos e inflación galopante, el ministro de Medio Ambiente Sergio Bergman se da el lujo de utilizar fondos del Estado para contratar los servicios de un emprendedor que pretende duplicar la cantidad de empleos registrados en los comercios de todo el país, mediante inversiones inventadas para crear una industria de hongos y larvas de mosca.

¿Ambicioso? Si, pero la palabra "fantasioso" le queda mejor. El autor del proyecto es un autor best seller, el belga Gunter Pauli, desarrollador de la 'Economía azul', que pretende constituir formas de producir a partir de desechos que permitan su reciclado para la generación de nuevos productos.

“Si uno lee la propuesta en detalle se encuentra con cosas inverosímiles, como que se estiman unos 700.000 puestos de trabajo asociados a la producción de hongos o 150.000 empleos asociados a la producción de larvas de mosca, pero son estimaciones que no se fundamentan en estudios hechos sino en anécdotas y microhistorias que se proyectan y se amplían”, cuestionó el economista Fernando Peirano, profesor e investigador en el Departamento de Economía y Administración de la Universidad Nacional de Quilmes, en un paper publicado por la Unsam.

Carlos León, doctor en Geografía de la universidad de San Martín consideró que se trata de un plan aplicable "en países muy desarrollados, donde los niveles de producción son tan altos que para elevarlos hace falta crear cosas absolutamente nuevas. La situación acá no tiene nada que ver con eso, sino con tratar de ver qué es lo que tenemos, por qué hay tan baja productividad y tan bajo ingreso de la población que produce”. 

León afirmó en el mismo informe de la Unsam que se trata de un "error desde el punto de vista del desarrollo económico, ya que lo que limita el desarrollo es la desigualdad de la distribución en los ingresos y la concentración de los recursos en pocas manos”.

El plan de Pauli que tomó un año de planeamiento, contempla la división en 18 eco-regiones, predice que la industria de larva de mosca emplearía a 150 mil personas, mientras que con los hongos se generarían 600 mil puestos nuevos: sin embargo, esa cantidad de trabajos duplica los actuales índices de empleo a lo largo del país en salud, agricultura y ganadería o educación, según compararon en un informe de Letra P.

Además, los especialistas que criticaron la falta de rigurosidad en la argumentación de cómo financiar y llevar a la realidad la propuesta, destacaron la no inclusión de las Malvinas en el brief pagado por Bergman, que por tratarse de un documento público debía incluirlas.

Bergman pagó un millón de dólares a un chanta que recomienda producir larvas y hongos