Con la excusa de la causa que investiga una supuesta maniobra en la venta de dólar a futuro, el magistrado planea el golpe de efecto político que busca el Gobierno macrista, debilitado en su imagen con miles de despidos, inflación, protestas y descontento popular, para reivindicar su ajuste mediante una opereta judicial contra la expresidenta, Cristina Fernández.

La información surge a partir de fuentes judiciales consultadas por el periodista de radio Del Plata, quienes aseguraron que el juez Claudio Bonadío "se siente San Martín" gracias al contexto generado en Comodoro Py -en relación a la ofensiva de los últimos días contra exfuncionarios- por lo que estaría dispuesto a poner en riesgo la "paz social".

Se trataría de un escrito que hablaría de la ex jefa de estado como líder de una asociación ilícita. El peso de la estratégica ofensiva judicial aumenta con el supuesto apoyo que le habrían ofrecido los jueces de la Corte Suprema a los magistrados federales, en una reunión llevada a cabo en los últimos días.