El evento se realizó de manera virtual por las restricciones sanitarias vigentes y, junto con las autoridades de ambas compañías, estuvieron presentes el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, el embajador chino en la Argentina, Zou Xiaoli, su par argentino en China, Sabino Vaca Narvaja, y el subsecretario de Energía Eléctrica de la Nación, Federico Basualdo.

El proyecto forma parte del Plan de Acción de Nucleoeléctrica Argentina, aprobado por el Poder Ejecutivo Nacional el 23 de junio del año pasado, y supone una inversión superior a los US$ 8.000 millones.

El contrato EPC (ingeniería, compras y construcción, por sus siglas en inglés) prevé la provisión de la ingeniería, construcción, adquisición, puesta en marcha y entrega de una central del tipo HPR-1000, que utilizará uranio enriquecido como combustible y agua liviana como refrigerante y moderador.

El presidente de Nucleoeléctrica, José Luis Antúnez, remarcó la importancia de avanzar en acciones concretas “para que podamos abastecer la demanda eléctrica de la Argentina con energía de base, limpia, segura y sustentable, y combatir los efectos del cambio climático que afecta al planeta”.

Atucha III tendrá una potencia bruta de 1.200 MWe y una vida útil inicial de 60 años, y permitirá ampliar las capacidades nucleares nacionales gracias a la transferencia de tecnología para la fabricación de elementos combustibles.

De acuerdo con los cronogramas previstos, las obras de construcción comenzarán a fines del corriente año y requerirán la creación de más de 7.000 empleos y una integración aproximada del 40% de proveedores nacionales.

"Todos sabemos que sin energía no tenemos desarrollo ni futuro posible, por lo que es para mí un enorme placer acompañar esta firma", destacó por su parte Kicillof.

Tweet de Axel Kicillof
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A la firma del contrato EPC le seguirá el cumplimiento de todas las condiciones precedentes estipuladas en el mismo, entre las que destacan las correspondientes autorizaciones de las autoridades competentes de ambos países, así como los acuerdos financieros y de transferencia de tecnología.

La construcción de una nueva central nuclear permitirá sostener la diversificación de la matriz energética y asegurar el suministro de energía confiable, segura y limpia.

A su vez, el sostenimiento de la energía nuclear como fuente de generación contribuirá con el cumplimiento de los compromisos internacionales asumidos por la Argentina en materia climática.