¿Qué dice este instructivo? Básicamente muestra la manera de proceder ante la toma de un establecimiento. ¿Cómo?, fácil: comunicándose con la comisaría más cercana, como un intento de criminalizar a los alumnos que llevan adelante una toma.

Por eso, Amnistía Internacional emitió un pedido de informe al gobierno porteño donde muestran su "preocupación". Según Mariela Belski, directora ejecutiva: "Este documento impone a los responsables legales de los establecimientos educativos criterios de actuación que entran en conflicto con derechos constitucionales, vulnerándose el derecho de los estudiantes de participar en las políticas que les conciernen, a ser oídos en sus reclamos y a manifestarse libremente".

La Convención de los Derechos del Niño garantiza el derecho de niños, niñas y adolescentes a ser oídos y a expresarse libremente, e impone, como correlato, que los Estados se abstengan de imponer restricciones irrazonables al ejercicio de estos derechos.

Pero la Ciudad desoyó estas advertencias y negó la existencia de cualquier tipo de instructivo, cuando hay pruebas de mails enviados a entidades educativas haciendo alusión a este accionar represivo. Incluso hay denuncias presentadas al respecto.

Mientras muchos legisladores de diferentes partidos y bloques repudian esto, varias escuelas permanecen tomadas por los alumnos que se oponen al polémico plan del ejecutivo porteño 'Escuela del Futuro', donde obligan a quienes cursan el último año a realizar pasantías gratuitas en compañías privadas, apoyando de esta manera la flexibilización laboral en los jóvenes.