La querella unificada de la AMIA y la DAIA pidió la absolución de funcionarios y ex dirigentes de su organización. Críticos de la posición desde Memoria Activa dijeron que "para la DAIA, el encubrimiento no existió".

"Este armado encubridor es el que los familiares venimos denunciando hace mucho tiempo, es lo que a su vez dictaminó en su sentencia del juicio por el atentado el Tribunal Oral Federal 3 (2001-2004), fallo ejemplar para las víctimas y para la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, confirmado luego, en lo sustancial, por la Corte Suprema de Justicia. Y es lo que la dirigencia comunitaria judía, sentada en la última fila de la sala de audiencias, se negó a admitir y pretendió esconder haciendo un análisis a las claras sesgado y descontextualizado de la prueba, en un pacto -para las víctimas vergonzoso y doloroso- con los encubridores", explicaron en el comunicado. 

"A su vez, criticaron la imputación en este juicio al ex presidente de la DAIA Rubén Beraja por considerarla una manera de ensuciar a la comunidad judía (¿Beraja es la comunidad judía?), dando a entender que la acusación contra el imputado, quien participó del armado encubridor, tendría una impronta antisemita", continúa el texto que publicó la agencia Paco Urondo. 

Para Memoria Activa la querella de la AMIA/DAIA tiene una "notable orfandad de argumentos". ya que "omitió mencionar que su (¿ex?) presidente traicionó los intereses que representaba y a las víctimas del atentado e incluso se benefició económicamente".

En tanto, La DAIA sí pidió penas para "solamente por los delitos cometidos en torno al desvío de la “pista siria”, que vinculaba con el atentado a una persona cercana al ex presidente Carlos Menem".

Para el entonces mandatario, las instituciones judías pidieron una condena de 4 años de prisión, misma cantidad que requirieron para Anzorreguy.

Por otra parte, la AMIA y la DAIA pidieron se lo condene a 3 años de prisión al ex juez Juan José Galeano, quien llevó adelante la investigación y lideró la maniobra encubridora. Finalmente, pidieron 3 años para el ex subsecretario de inteligencia Juan Anchezar, y lo mismo para los ex comisarios Carlos Castañeda y Jorge Palacios.

Antes de terminar, la querella insistió en que tiene la “certeza” de que una “conspiración” encubridora del atentado “no ocurrió” e interpeló al tribunal para que “no dude en dictar condenas pero también absoluciones”.