“Gracias al compañero que está tan enojado, gritando”, arrancó Alberto Fernández.

Y al rato le dijo: “Hemos pasado cuatro años muy difíciles y una de las cosas que tenemos que aprender es a hablar en voz baja nuestras diferencias. No hace falta maltratarnos más. Recuperemos la convivencia democráticas, ahora que vemos lo que ha pasado en Brasil”.

“Estoy seguro que el compañero que se quejaba lo hacía honestamente, se equivocaba en el modo, pero hay que escucharlo”, remarcó.