En las últimas horas se conocieron los resultados de la convocatoria 2018 de ingreso Conicet: de 2.500 candidatos, sólo ingresaron 450. Es decir que, producto del ajuste y los recortes al sector, cerca de 2.050 doctores (grado y posgrado, formados en universidades nacionales por más de 12 años) quedaron excluidos. 

El organismo aprobó el acceso de sólo el 17,7 por ciento de los postulantes, lo que significa que más de dos mil doctores formados en universidades nacionales por más de 12 años fueron expulsados del sistema científico nacional.

Las oportunidades no sólo mermaron dentro del Conicet -el organismo más importante del país en la materia-, sino también en entes descentralizados como INTA, INTI, CNEA y CONAE. En todos ellos los despidos se contaron por centenares, y las contrataciones a cuentagotas.

El deterioro es indiscutible, y se vuelve evidente si se observan los números del programa Raíces, creado por el gobierno anterior para repatriar científicos. Hasta 2016 logró el retorno de casi 1.300 investigadores, a un promedio de 102 por año. Con el macrismo, en 2017 y 2018, sólo regresaron seis.

Roberto Salvarezza on Twitter

“Hace tres años que Macri y Barañao pusieron fin a una política de crecimiento y expansión del CONICET y discontinuaron el Plan Argentina Innovadora 2020, que preveía aumentar la cantidad de científicos en el país. Hoy cientos de jóvenes investigadores piensan en irse al exterior”, aseguró a Canal Abierto el bioquímico, diputado nacional y expresidente del Conicet, Roberto Salvarezza.