Lo de Francos en el Congreso fue un verdadero papelón. El hombre se dedicó a tirar la pelota afuera y no contestar concretamente ninguna pregunta. Tan es así que hasta le tuvieron que preguntar si prefería la playa o la montaña a modo de chicana para ver si respondía algo.

En realidad el jefe de Gabinete tenía como objetivo desviar la atención del tema importante que era la participación del Presidente en una estafa, aunque para eso tuviera que desviarse hablando del supuesto exingeniero Blumberg. 

Pero Francos en un momento de su alocución aseguró que Milei estaba en Olivos cuando hizo la polémica publicación que inició la estafa, como si el estar en la Quinta Presidencial hiciera a Milei menos Presidente.

Feudale entonces llegó a la conclusión de que todo lo que se haga en Olivos no es punible, con lo cual Alberto Fernández no habría cometido ningún delito violando su propio decreto y haciendo el cumpleaños de Fabiola en esa propiedad del Estado, ya que el mismo no fue en la Casa Rosada.