“Yo entiendo a la gente de mi provincia cuando no puede cobrar el sueldo en tiempo y forma. Si bien los sueldos de quienes ganan menos los hemos priorizado y hoy solo nos resta pagar a los jubilados que ganan más de 60 mil, y así hemos ido avanzando, o a los judiciales, la gente debe cobrar los sueldos porque la economía se tiene que mover”.

Son palabras de la gobernador Alicia Kirchner, quien por estos días y meses se ve aquejada por dos frentes, en realidad dos caras de la misma moneda: el desfinanciamiento al que somete a Santa Cruz el Gobierno Nacional y los trabajadores estatales de la provincia que protestan porque no cobraron sus salarios. Lo segundo, claro está, deriva de lo primero.

Sin embargo, la gobernadora advirtió que “solamente con los sueldos de la administración pública no se puede” reactivar la economía de la provincia, que sufre como pocas la brutal caída del consumo y la recesión que desataron las políticas implementadas desde el gobierno de Mauricio Macri.

“Necesitamos que se reactive la obra pública,  que se ejecute el plan previsto de la red de gas, las redes que faltan del interconectado”, añadió la mandataria provincial por radio LU14, ratificando lo que venía siendo noticia: que el Gobierno Nacional paralizó toda la obra pública en Santa Cruz.

Pero el ahogo al que el macrismo pretende hacer llegar a la provincia también tiene su lado oculto, lo que Alicia Kirchner denominó “desfinanciamiento invisible”. Eso también afecta a la provincia. Recarga en los costos de lo que ya no llega, como por ejemplo los remedios que debe costear la provincia, la ayuda que debe darse desde el Ministerio de Desarrollo Social. Todo eso es lo invisible que también impacta en los números de la provincia y altera el equilibrio”.

Y más que oculto, el lado oscuro del ‘apriete’ macrista sobre Kirchner apunta a que la mandataria tenga “un plan serio”, es decir, que avance en el ajuste sobre las espaldas de los trabajadores santacruceños: “¿Qué es un plan serio? Lo que le pidieron a un intendente de Cambiemos de echar gente, la verdad es que eso yo no lo voy a hacer jamás. La sostenibilidad del empleo es fundamental”.