La imagen del cantante de U2, así como de otros íconos de la música, estuvo siempre asociada a sus modernos anteojos oscuros (casi rojizos), con lo que se los ve ocasionalmente. Pero no es una casualidad.

El cantante dio a conocer que sufre de glaucoma, una enfermedad que comprende a la vista, donde si no se realiza un tratamiento apropiado, se puede perder la visión en poco tiempo.

Por eso, el líder de U2 confirmó que no se quita las gafas nunca desde hace 20 años, ni siquiera en lugares cerrados. Así lo comentó al programa Graham Norton Show.

Igualmente, afirmó que recibe tratamientos constantes y "está bien". La intervención del músico en la BBC se debe a la promoción que actualmente lleva a cabo el grupo irlandés con motivo del lanzamiento de su último álbum, "Songs Of Innocence".