Por lo que se ha podido escuchar del último disco de los Red Hot Chili Peppers, “The Getaway”, el bajo de Flea suena completamente normal, o al menos es a lo que el músico nos tiene acostumbrados. Sin embargo, de acuerdo con una reciente entrevista con Rolling Stone, Flea confesó que debió aprender a tocar el bajo desde cero para grabar el nuevo álbum luego de sufrir un fuerte accidente mientras hacía snowboard en un viaje con el cantante Anthony Kiedis.

“Estábamos bajando la montaña a 80 kilómetros por hora cuando perdí el control. Mi brazo se empezó a hinchar de inmediato. Me rompí el brazo en cinco partes y me tuvieron que sacar algunos huesos grandes”, dijo el músico.

Después de bajar la montaña como pudo, Flea se subió a una ambulancia y fue trasladado al hospital donde se sometió a una cirugía para reparar los daños en los nervios. En ese momento se llevó el susto de su vida, ya que pensó que no volvería a tocar el bajo. “Fui a tocar una nota y sentí un montón de dolor en mi brazo. Intenté tocar las cosas más simples pero mi mano no lo pudo hacer. Sentí que estaba defraudando a todo el mundo porque no íbamos a poder trabajar en el disco”, señaló.

Afortunadamente, después de seis meses de rehabilitación intensiva, Flea volvió a “pegarle” al bajo como él solo lo sabe hacer. La particularidad de esta historia es que la herida forzó al grupo californiano a darle un nuevo enfoque creativo al álbum, abandonando a Rick Rubin como productor para incorporar a Brian “Danger Mouse” Burton.

Los resultados los podremos ver el 17 de junio  cuando “Getaway” salga al mercado.

Escuchá los adelantos de "Getaway"