Veo una nota en Clarín que, la verdad, no se cómo manejar. Titula así: "Tan Biónica y La Mancha de Rolando: el rock cerró la Grieta". ¿Rock?
En la bajada, con un maquiavelismo puro del periodismo, afirman: "Las bandas sonoras del PRO y el kirchnerismo, respectivamente, actuaron juntos ante 50 mil personas". ¿Bandas sonoras?
Señores con pluma, varias cuestiones. En primer lugar, La Mancha NO ES la banda sonora del kirchnerismo, ni mucho menos. No porque quizá no lo hayan querido en su momento, sino porque nunca la militancia k los adoptó como tal.
En segundo lugar, si Tan Biónica y La Mancha, o por lo menos ésta versión de La Mancha, representan la unión total del rock y de las corrientes ideológicas, políticas, sociales, o como quieran llamarlas, de nuestro país... estamos en problemas.
Dónde quedaron las noches de zapatillas gastadas cuando íbamos a ver a Manu Quieto y compañía a todos lados, cuando con una impronta rockera invitaban al Chizzo a cantar. El Chizzo, justamente, ahí tenés una representación del rock nacional. ¿Y por qué no? de la sociedad antimacrista.
Dónde quedó aquella banda crítica, que denostaba contra Franchella y Tinelli en sus shows, que criticaba a los medios, que tocaba con la remera de 'Clarín Miente', para luego agarrar las migajas que éstos le dejan. ¿Qué pasó en el medio?
Pero, lejos de ponerme nostálgico, vuelvo al seno: La Franela, ahí tenés una banda a la cual la podés 'vincular' con la militancia k. De hecho, hace poco en una entrevista que hice con 'Pity' para el Suplemento NO SE, el músico dejó bien en claro su ideología, que siempre fue la misma.
Este es uno de otros ejemplos de bandas a las que podríamos, si fuera necesario, vincular con los ideales progresistas del kirchnerismo. Pero La Mancha, no.
Así que, señores periodistas, sean conscientes con el uso de la palabra y la información. Nos bancamos que tergiversen declaraciones, que ocupen espacio en los televisores con hechos irrelevantes (o sólo relevantes para sus intereses), que mientan, que difamen... pero, por favor, no se metan con el rock. Parafraseando al Diego: "El rock no se Mancha".

Veo una nota en Clarín que, la verdad, no se cómo manejar. Titula así: "Tan Biónica y La Mancha de Rolando: el rock cerró la Grieta". ¿Rock?.

En la bajada, con un maquiavelismo puro del periodismo, afirman: "Las bandas sonoras del PRO y el kirchnerismo, respectivamente, actuaron juntos ante 50 mil personas". ¿Bandas sonoras?.

Señores con pluma, varias cuestiones. En primer lugar, La Mancha NO ES la banda sonora del kirchnerismo, ni mucho menos. No porque quizá no lo hayan querido en su momento, sino porque nunca la militancia k los adoptó como tal.

En segundo lugar, si Tan Biónica y La Mancha, o por lo menos ésta versión de La Mancha, representan la unión total del rock y de las corrientes ideológicas, políticas, sociales, o como quieran llamarlas, de nuestro país... estamos en problemas.

Dónde quedaron las noches de zapatillas gastadas cuando íbamos a ver a Manu Quieto y compañía a todos lados, cuando con una impronta rockera invitaban al 'Chizzo' a cantar. 'El Chizzo', justamente, ahí tenés una verdadera representación del rock nacional. ¿Y por qué no? de la sociedad antimacrista.

Dónde quedó aquella banda crítica, que denostaba contra Francella y Tinelli en sus shows, que criticaba a los medios, que tocaba con la remera de 'Clarín Miente', para luego agarrar las migajas que éstos le dejan. ¿Qué pasó en el medio?.

Pero, lejos de ponerme nostálgico, vuelvo al seno con un clarinísimo, digo, clarísimo ejemplo: La Franela, ahí tenés una banda a la cual la podés 'vincular' con la militancia k. De hecho, hace poco, en una entrevista que hice con 'Pity' para el Suplemento NO SE, el músico dejó bien en claro su ideología, que siempre fue la misma.

Este es uno de otros ejemplos de bandas a las que podríamos, si fuera necesario, vincular con los ideales progresistas del kirchnerismo. Pero La Mancha, no.

Así que, señores periodistas, sean conscientes con el uso de la palabra y la información. Nos bancamos que tergiversen declaraciones, que ocupen espacio en los televisores con hechos irrelevantes (o sólo relevantes para sus intereses), que mientan, que difamen... pero, por favor, no se metan con el rock. Parafraseando al Diego: "El rock no se Mancha".