Desde el siglo XVI, en todo el mundo se festeja el Día de la Música. Y con tanta liviandad, miles y miles de músicos y aficionados envían sus mensajes, pero en realidad, ¿qué están festejando? ¿Quién impuso que sea el Día de la Música? ¿Por qué?

Son muchas preguntas que tienen respuesta. El que implantó a esta fecha como una celebración para los músicos fue el papa Gregorio XIII, cuando le asignó el cargo (para nosotros más importante) a Santa Cecilia.

Cecilia fue una joven romana de una familia bastante bien acomodada, a la que el Sumo Pontífice nombró patrona de los músicos, en una oleada de beatificaciones que se repartían como decretos para la humanidad.

La historia de Santa Cecilia cuenta sobre un matrimonio obligado por su padre, sobre una posterior muerte de su esposo, y sobre un juicio contra la joven romana, por parte de las autoridades locales.

En dicho juicio se la condenó a muerte por no jurar su fe a dioses paganos. La encerraron en un baño e intentaron asesinarla sofocándola con fuego, pero cuenta la leyenda que entre las llamas se escuchaba su canto. Al abrir la puerta del cuarto, los verdugos vieron que todavía continuaba con vida y la mandaron a decapitar.

Pero más allá de esta dramática historia, ¿cómo podemos relacionarla con la música? Según la Iglesia, su canto al morir, como también la suposición que -de joven- Santa Cecilia tuvo que haber tocado algún instrumento, tal como marcaban las costumbres de la aristocracia romana, fueron excusa para hacerla dueña de este nombramiento.

La misma Iglesia también afirma que la joven podía ver a su ángel de la guarda y que había entregado su virginidad a Dios, además de aceverar, que mientras los músicos tocaban en su boda, ella le cantaba a Dios en su corazón.

Pero muchos descreen de esta celebración, impartida por la Iglesia Católica. Otros, no saben la historia, y solo se dignan a festejar el Día de la Música por mera tradición.

En el caso de la Argentina, es diferente. Ya que nuestro Día de la Música fue votado por el Congreso como el 23 de enero, nada más y nada menos que conmemorando el nacimiento del que fuera uno de los más grandes músicos del país: el 'Flaco' Spinetta.

Desde el Suplemento NO SE sostenemos que la música es sinónimo de libertad. Y, por lo tanto, no puede estar atada a ningún tipo de religión, ideología política, tradición, color, ni ninguna etiqueta impuesta por nadie. Solo es música.