Kang Hu, un chino de 33 años, se vio obligado a tener un casamiento arreglado, y cuando vio a su futura esposa por primera vez huyó corriendo de la boda para tirarse al río en un intento de suicidio.

Pal Chang Wang, uno de los invitados y testigo de todo lo ocurrido explicó que "fue un momento muy incómodo para todos. La novia estaba devastada, la familia de ella estaba furiosa, la familia de él también estaba furiosa, y sus amigos avergonzados. Kang tiene gustos muy especiales y ha sido forzado a este matrimonio".

Parece ser que el novio, antes de salir corriendo y decirle que era "muy fea" le había pedido disculpas a la joven de 30 años. Horas después, Kang Hu fue encontrado completamente inconsciente a orillas de un río.

Según informó el fotógrafo de los hechos, cuando encontró al joven "estaba con toda su ropa y sumergido con la cara en el agua. Estaba inconsciente, incluso creí que estaba muerto. Cuando llegó la policía, uno saltó y lo agarró, le pusieron una cuerda en la cintura y lo subieron. Le salvaron la vida".

Kang Hu fue trasladado al hospital para ser estabilizado y más tarde, explicar la decisión que había tomado: "Me siento mal por lo que ha pasado, pero cuando la vi ella no era lo que yo esperaba y me di cuenta que eso me daría mala imagen. Mis padres habían arreglado la boda y no vi otra salida salvo el suicidio".