lyssa Hatcher, de 17 años, fue detenida el pasado lunes en Florida, Estados Unidos, luego de robar la tarjeta de crédito de sus padres y contratar a dos sicarios para asesinarlos.

La joven confesó a la policía que pagó un poco más de 1.300 dólares a dos personas para cometer el crimen, además de gastar unos 100 en cocaína.

Por su parte, el novio de Hatcher y un amigo confirmaron a los detectives que planeaba el homicidio y que constantemente hablaba al respecto.

Finalmente, Hatcher fue procesada por incitación al asesinato. "La menor sospechosa fue puesta bajo custodia y trasladada a la cárcel del condado de Lake, donde fue procesada y entregada al Departamento de Justicia Juvenil", señaló un comunicado.

Sus padres, una enfermera y un policía, tomaron medida penales contra su hija. "Los padres presentaron cargos. Cuando se trata de algo así, no puedo imaginar el 'shock' que sentiría como padre", dijo a la prensa Fred Jones, de la Oficina del Sheriff. "Son buena gente y ciudadanos destacados", agregó al referirse a ambos.