Un británico de 50 años descubrió que las frecuentes jaquecas, pérdida de memoria y convulsiones que sufría se debían a que tenía un gusano parasítico en su cerebro desde hace cuatro años.


Según informó The Telegraph, el hombre acudió al médicos en 2008 luego de sufrir los problemas anteriormente descritos, además de un “cambio a su sentido del olfato”.


Imágenes de su cráneo obtenidas por resonancia magnética revelaron una serie de lesiones en el cerebro del paciente, aunque los doctores desconocían las causas de las mismas. Durante los próximos cuatro años, su sorpresa aumentó por el hecho de que las lesiones se desplazaron unos cinco centímetros del hemisferio izquierdo al derecho.

Numerosas pruebas y biopsias a lo largo de los años terminaron en 2012, cuando los doctores encontraron los restos de un gusano de unos 10 centímetros en el celebro del paciente, el cual fue tratado con medicina antiparasítica.


El gusano causa que los tejidos corporales se inflamen, causando los dolores de cabeza, convulsiones y pérdida de memoria anteriormente experimentados por el paciente.  


Uno puede ser infectado al comer crustáceos infectados, además de carne cruda de reptiles y anfibios. También el usar ranas crudas como cataplasma, un tradicional remedio chino para ojos irritados.