Phillip Weicker y Duncan Forster pasaron los últimos seis años de sus vidas modificando su Cadillac DeVille modelo 1969, en un jacuzzi convertible sobre ruedas.


Los pedales del vehículo se sustituyeron por una plana de aceleración de lancha que controla la velocidad y los frenos.


En Alemania ya habían intentado esta hazaña, aunque los creadores fueron detenidos por la policía apenas pisaron la ruta.