Una gran cantidad de cocaína procedente de Colombia llegó a 13 supermercados de la popular cadena de supermercados Aldi, ubicados en la capital alemana, escondida entre cajas de bananas.

Al desempaquetar las cajas para luego colocar los productos en las góndolas, los empleados se dieron cuenta que no se trataba de alimentos sino de droga.

"Al parecer, hubo un error logístico en algún momento", dijo el portavoz de la policía Stefan Redlich.

No es la primera vez que esto sucede, ya que en enero de este año un cargamento de cocaína valorado en 5.000.000 de dólares también se disperso por varios supermercados dentro de la zona de Berlín.

Muchos traficantes usan cargamentos de comida para camuflar drogas. En octubre, la policía alemana encontró 330 kilos de heroína dentro de unos pepinos procedentes de Irán.