Una joven, que prefirió permanecer en el anonimato, se fotografió los pechos con la aplicación Snapchat para enviársela a su pareja, pero se confundió de destinatario y terminó en manos de su jefe.

La mujer se tomó una selfie en una pose seductora levantándose la remera y mostrando uno de sus pechos, junto a una frase que decía: “mira lo que te vas a perder este fin de semana”.

Su jefe, bastante comprensivo, le contestó al recibirla. "Hola, es probable que no tuvieras intención de enviarme esto a mí, pero por favor, tené más cuidadoso. Soy tu jefe”.

Afortunadamente el caso no pasó a mayores y la joven logró mantener su trabajo.