Un juez de la organización Guinness World Records certificó que los especialistas en masa de pan pudieron confeccionar una única pieza de 122 metros de largo, para que luego sea horneada en la Feria Mundial de Milán: lograron la baguette más larga del mundo.

Fueron alrededor de 60 panaderos franceses e italianos que trabajaron casi siete horas para hornear el bollo gigante, famoso por su exterior tostado y crocante, mientras que en su interior la masa queda suave.

La metodología implementada fue la de avanzar la estructura de un horno portátil a lo largo de la masa ya preparada, especialmente para soportar el calor y cocinar la mezcla de harina.

Los panaderos trabajaron a un ritmo de 20 metros por hora, pero su avance se complicó porque trabajaron al aire libre y el mayor desafío fue evitar que la pieza se quebrara.

“Como es de suponer, es muy difícil hacer una baguette gigante en el exterior, por las bajas temperaturas”, dijo Dominique Anract, uno de los panaderos y dueño de la panadería Pompadour en París.

La empresa italiana Ferrero, fabricante de la crema dulce Nutella, respaldó el proyecto para romper el récord vigente, de 111 metros, en poder de una cadena francesa de supermercados.