Marina Hody, de Sebastopol, Rusia, ha demostrado que no tener brazos no le impide realizar las tareas cotidianas. Puede cocinar, limpiar, maquillarse, escribir e incluso dibujar muy bien: todo con los pies, ya que no quiere usar prótesis.

Siete años después de la tragedia de Chernóbyl nació Marina Hody, de 21 años, en la ciudad de Saki en Crimea, y con tan solo diez años ya era toda una celebridad incluso fuera de su país, pero no por el hecho de no tener brazos, sino gracias a su gran talento.

La joven dibuja muy bien, hace bordados sofisticados y escribe con una caligrafía excepcional. En la vida diaria se  arregla con todo, ya que es capaz de cocinar para su familia, lavar los platos y pelar papas, todo con ayuda de sus pies.

Si bien la joven recibió una oferta para implantarle una prótesis, ella no quiso saber nada. "Me lo hubieran pagado todo, pero me negué rotundamente. ¿Para qué necesito prótesis? Nací así, nunca he tenido brazos, para mí no sería natural", señaló.

"No entiendo a la gente que se suicida. ¿Qué es lo que les falta? No hay que concentrarse en los problemas y las dificultades. ¡Hay que vivir y mirar hacia el futuro! ¡Así que, pase lo que pase, amen la vida!", concluyó la joven.