Thomas Gough, de 20 años, llamó a su amigo, identificado como Mateo Whitehurst, de 34, para tomar una botella de vodka en su casa ubicada en Stoke-on-Trent, Inglaterra y pasar el rato como cualquier otro día.

Sin embargo, la intención de joven era otra. Con una cuchilla le hizo un corte de ocho centímetros en el brazo de Matthew y con un vaso juntó la sangre.

Al ser consultado, el joven “vampiro” aseguró que necesitaba la sangre para poder “sobrevivir”.

Según informó el diario Mirror, la víctima debió recibir 10 puntos en su brazo.

Finalmente, Thomas fue condenado a 6 años y 8 meses en una institución para jóvenes delincuentes.