Una ventana se convirtió en el obstáculo más dificultoso para un ladrón que, según sus planes, quería entrar a un domicilio y huir con objetos de valor. Sin embargo, sus chances quedaron nulas y necesitó la ayuda de los oficiales para salir de su graciosa situación.

La dueña de casa -una mujer de 60 años- vio cómo, desde la ventana de su baño, un hombre colgaba a cuatro metros de altura, por lo que realizó la denuncia. Sin embargo, cuando la señora descubrió que el ladrón no podía zafarse, este muchacho pasó el rato más vergonzoso de su vida. 

Todo sucedió en la localidad de Radcliffe, Gran Manchester en Inglaterra, donde Sean Crawshaw, de 47 años, fue sentenciado unos días después del hecho, por haber sido descubierto in fraganti, intentado cometer un ilícito.

Elagente Norman Taylor señaló: “Es la primera vez que vemos esto. Ya pasó antes que ladrones queden atascados en ventanas, pero normalmente logran liberarse. Decidimos llamar a este hombre el 'ladrón torpe'", reconoció el oficial

“Nos divertimos un poco con esto, pero también queremos que sirva como advertencia. La gente suele creer que, si no hay escaleras de por medio, los ladrones no pueden trepar, pero ya ven”, expuso Taylor.