Dos alumnos de la Universitat de València, ubicada en la ciudad homónima española, fueron arrestados por ser los supuestos autores de los delitos de acceso ilícito a datos y programas informáticos, daños informáticos, descubrimiento y revelación de secretos, usurpación de estado civil y falsedad de documento público.

Las investigaciones comenzaron tras el hallazgo de un dispositivo espía tipo keylogger en una de las computadoras de la universidad.  Se trata de un software capaz de interceptar y guardar las pulsaciones realizadas en el teclado de un equipo informático sin que el usuario lo detecte.

Durante las pesquisas, los agentes lograron corroborar que se robaron las claves de unos 40 profesores, a través de las cuales accedieron a sus cuentas personales de la intranet de la universidad y a sus correos electrónicos desde una serie de direcciones IP relacionadas con la red TOR. Se trata de una red de comunicaciones distribuida por encima de la capa de internet de manera que nunca se revelan los datos de los usuarios que la utilizan, manteniéndose así como una red privada y anónima.

Los jóvenes habían suspendido muchos de los trabajos o exámenes y posteriormente contaban con buena nota lo que hizo que pudieran dar con ellos. 

Los policías averiguaron que las calificaciones de muchos exámenes y trabajos suspendidos en un primer momento, posteriormente aparecían como aprobados con una buena nota en las actas, para lo cual presuntamente interceptaban el mensaje de aviso de cambio de nota que el sistema informático enviaba al docente, evitando que éste se percatara. Las notas finales eran publicadas en las actas oficiales sin que nadie se percatase del fraude.

Los detenidos, sin antecedentes policiales, tras ser oídos en declaración han sido puestos en libertad, no sin antes ser advertidos de la obligación de comparecer ante la autoridad judicial cuando sean requeridos para ello.

(Europa press)