David Newman, un médico de 45 años que estaba de guardia en el Hospital Mount Sinai de Nueva York, fue acusado de haber eyaculado en la cara de una paciente mientras esta estaba bajo los efectos de la droga que él le había administrado.

La paciente, de 22 años, cuya identidad no se dio a conocer, acudió al hospital por un fuerte dolor en su hombro donde fue atendida por David, quién le administró dos dosis de morfina, dejándola consciente pero incapaz de moverse.

Según le contó la paciente a la policía, el médico le acarició los pechos y se masturbó delante de ella para luego eyacular en su cara. Una vez que la joven recuperó la movilidad, logró tomar muestras de semen que colocó en una bolsa para reportar el abuso del médico ante las autoridades.

David, un veterano de la guerra de Irak que fue galardonado por su participación en el conflicto, ahora se encuentra a la espera de un juicio que determinará su culpabilidad.