Fatalidad y suerte se cruzaron en la última jugada del partido en el que Irán le ganó a Marruecos.

Es que los asiáticos vencieron a los africanos con un tanto en contra de Bouhaddouz. 

Así, Irán consiguió tres puntos clave en el Grupo B y su segunda victoria en la historia de la Copa del Mundo. La anterior había sido en Francia 98 ante Estados Unidos.