Robbie Williams está en boca de todos. Es que, mientras interpretaba la conocidísima canción 'Rock DJ' durante la apertura del Mundial, el cantante levantó el dedo del medio, que en algunos países significa una verdadera ofensa. 

Pero no fue solo un gesto de rebeldía. Sino que al mismo tiempo modificó parte de la letra para que el mensaje sea más contundente aún. 

En vez de decir: "Most of them fleece me every night”, la modificó y dijo: "Most of them fleece me but i did this for free”, lo que en españól sería: “La mayoría me despluma, pero hice esto gratis”. 

Muchos creyeron que se refería, en general, a las críticas que reciben los artistas cuando aparecen en este tipo de eventos por los cachet que cobran. Pero no. 

El ataque iba teledirigido a Bill Browder, un empresario británico y constante crítico de Vladimir Putin, quien hace sólo 2 días le dedicó un tweet al artista en el que decía: 

“Hay muchas formas de ganar dinero @robbiewilliams, pero venderle tu alma a un dictador no debiera ser una de ellas. Debería darte vergüenza”

Robbie Williams, que fue incluso etiquetado por el opositor, no contestó. Sino que esperó la oportunidad perfecta para hacerlo, de una manera muy elocuente. 

El empresario recibió el mensaje correctamente y le dedicó otra publicación al cantante afirmando que Williams estaba “furioso por su llamado de atención al legitimar a Putin”.