Una de las hipótesis que manejan los bomberos es que las fuertes precipitaciones de los últimos días hicieron que las paredes del cañón se ablandaran llevando a una piedra de gran tamaño a desprenderse.

Esto ocurrió en el Lago de Furnas, en Capitolio, al sur del estado de Minas Gerais. Este suele ser un destino turístico de la zona donde pueden recorrerse las gargantas que se forman, en paseos de lancha.

Precisamente desde una de ellas un turista pudo captar el momento exacto en la enorme piedra se desprende y cae sobre las embarcaciones.

Hasta el momento se sabe que siete de las personas que estaban sobre las lanchas fallecieron, otras están en grave estado y el resto fueron atendidos con heridas menores en los centros de salud del lugar.