"Quisiéramos agradecer a todos los que nos respaldaron y nos ayudaron en un año lleno de horror y miedo, incredulidad, desasosiego, estupefacción, desesperación y duelo no elaborado y nos ayudaron a sobrellevar esta gran pérdida y todo lo que nos cayó encima. Hemos perdido a un ser humano cariñoso y valioso", dice la carta que firman los padres y el hermano de Lubitz y que desató una intensa polémica.

Los familiares de las víctimas no tardaron en reaccionar y mostraron su descontento. "Sólo podemos visitar a nuestro hijo asesinado en su tumba. Y en el aviso de agradecimiento la familia de Lubitz lo describe como una persona valiosa. Nuestra indignación no puede ser expresada en palabras", comentaron los padres de una de las víctimas a través de representante legal, Elmar Giemulla.

Otro familiar señaló al diario Bild: "Puedo entender el duelo de los padres, han perdido a su hijo. Me faltan palabras para reaccionar a esta ignorancia y falta de respeto hacia los muertos".

La carta de la familia Lubitz generó mayor tensión en la opinión pública al coincidir con dos servicios religiosos en memoria de los 16 alumnos de secundario y las dos maestras que murieron al chocar el avión.