El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, acusó a su antecesor, Barack Obama, de intervenir sus teléfonos en octubre, durante la campaña presidencial, pero no presentó pruebas que respaldaran sus dichos.

"¡Terrible! Acabo de enterarme de que Obama tenía mis 'comunicaciones intervenidas' en la Torre Trump justo antes de la victoria. No se encontró nada. ¡Esto es McCarthyismo!", tuiteó este sábado Trump, citando la persecución a comunistas en EE.UU. liderada por el senador Joe McCarthy en los años 50.

"Qué bajo cayó el presidente Obama al pinchar mis teléfonos durante el sagrado proceso electoral. Es Nixon/Watergate. ¡Tipo malo (o enfermo)!", publicó en otro mensaje en Twitter.

El caso golpeó fuerte a la administración Trump porque se revelaron vínculos entre el gobierno de Trump y Rusia. 

Horas después, Kevin Lewis, vocero de Obama, dijo: "Ni el presidente Obama ni ningún otro funcionario de la Casa Blanca jamás han dado la orden de vigilar a ningún ciudadano estadounidense".

"Cualquier sugerencia que indique lo contrario es sencillamente falsa", agregó.

"Una regla cardinal de la Administración Obama fue que ningún funcionario de la Casa Blanca interfiriera con cualquier investigación independiente del Departamento de Justicia", indicó Lewis en un comunicado. "Ni el presidente Obama o cualquier funcionario de la Casa Blanca jamás ordenaron la vigilancia de un ciudadano norteamericano. Cualquier sugerencia contraria es simplemente falsa", completó Lewis.