Sucedió en Lieja donde se investiga un probable acto terrorista, informó Página 12 este lunes. El homicida, quien fue abatido, era Benjamín Herman, de 36 años.

Primero atacó a puñaladas dos mujeres policías y tras arrebatarles un arma, les disparó para matarlas. Tras lo cual asesinó al joven de un auto cuando quiso robarlo para huir. Como no pudo se metió a un colegio segundario, donde donde tomó como rehén a una trabajadora del establecimiento, informó el mismo medio.

Fuerzas de seguridad lograron abatirlo, aunque antes hirió a cuatro efectivos, uno de ellos en estado grave.

Herman había estado en prisión hasta el día anterior, por delitos menores. Según la cadena de radio RTL, en la cárcel de Lantín frecuentó a detenidos radcializados. Otra fuente, RTBF, informó que Herman estaba fichado desde febrero de 2017 como “sospechoso de radicalización”. De hecho, aunque la fiscalía no lo confirmó, el atacante grito “Alá es grande” antes de atacar a su víctimas, según fuentes policiales.