En medio de la segunda ola de coronavirus que afecta a Europa, el ministro de Salud británico, Matt Hancock, reconoció este domingo que la nueva cepa detectada en Londres y el sureste del país está "fuera de control" y por eso el Gobierno debió actuar "rápidamente y con decisión".

La nueva cepa no es más grave, pero se propaga más rápido, según advirtieron las autoridades, situación que el Reino Unido informó a la Organización Mundial de la Salud.

"Es una enfermedad mortal y debemos controlarla, lo cual es más difícil con esta nueva variante", afirmó Hancock en una entrevista con la cadena británica Sky News citada por la agencia de noticias Europa Press.

Hancock recordó que los casos se “dispararon” en los últimos días y advirtió que el país se enfrenta a "un momento muy difícil de controlar hasta que llegue el desembarco de la vacuna", más allá que hasta las 20 horas del sábado ya se habían vacunado 350 mil personas.

Tras la aparición de una nueva cepa de coronavirus que se está extendiendo de forma acelerada en Londres y el sureste de Inglaterra, estas regiones pasaron este domingo del nivel 3 al 4, el más estricto de todos, anunció el primer ministro británico, Boris Johnson.

Hancock calificó de "absolutamente irresponsable" el éxodo protagonizado en la víspera por miles de personas que decidieron abandonar Londres y el sureste de Inglaterra  apenas se declaró el confinamiento para ambas zonas por el repunte de los casos de coronavirus por una nueva cepa de contagio acelerado.