"El presidente Putin considera los ataques estadounidenses a Siria como agresión a un Estado soberano en violación de las normas del derecho internacional y, encima, bajo un pretexto inventado", declaró el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, según consignó Spuntnik Mundo y la agencia de noticias EFE. 

El ataque ordenado por Donald Trump supone una represalia al supuesto uso de armas químicas en Khan Shaykhun del que Washington culpa a Damasco que, a su vez, lo niega.

El portavoz de la Presidencia rusa afirmó que "el Ejército de Siria no dispone de armas químicas" y recordó que la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) había confirmado la destrucción del arsenal correspondiente.

"Obviar por completo que las armas químicas son utilizadas por los terroristas, en opinión de Putin, no hace sino agravar la situación en grado considerable", aseveró Peskov.

Además, agregó que "Putin también ve en los ataques de Estados Unidos a Siria un intento de desviar la atención de la comunidad internacional de las numerosas víctimas civiles en Irak".

Lavrov, por su parte comparó el ataque con misiles contra dos buques de guerra emplazados en el Mediterráneo "a la situación de 2003, cuando Estados Unidos y el Reino Unido, con sus aliados, invadieron Irak sin autorización del Consejo de Seguridad", señaló el funcionario desde Taskent, la capital de Uzbekistán.

La diferencia -agregó- "es que entonces intentaron mostrar una 'prueba', y mi buen colega Colin Powell (secretario de Estado de EEUU en 2003), agitó en el Consejo de Seguridad una probeta con pasta de dientes que le habían dado los de la CIA, intentado demostrar que era ántrax".
"Pueden decir lo que quieran, pero el ataque, desde luego, es más que palabras", aseveró el jefe de la diplomacia rusa, quién adelantó que Rusia exigirá una investigación para esclarecer cómo se tomó la decisión de atacar la base aérea siria de Shayrat.

También advirtió de que la acción militar "daña las ya de por sí maltrechas relaciones entre Rusia y EEUU", aunque se mostró esperanzado de que "esta provocación no lleve a resultados irreversibles".

"Si nos preguntamos a quién conviene lo sucedido, resulta que sólo a aquellos que quieren torpedear los procesos de Ginebra y Astaná, y crear pretextos para pasar del arreglo político al derrocamiento del gobierno" de Bashar al Assad, señaló Lavrov.

Algunos países de Occidente, apuntó, parecen tener interés en proteger a la organización terrorista Frente de la Conquista del Levante (antiguo Frente al Nusra).

"Volvemos a pensar que Al Nusra, que cambia de nombres y se mimetiza, es vista por nuestros colegas occidentales como una organización que hay que cuidar, pese a que ha sido declarada terrorista por el Consejo de Seguridad de la ONU", denunció el ministro.

(Fuente Telam)