Las imágenes tienen lugar en una escuela secundaria de Kerch, en Crimea -territorio disputado por Rusia y Ucrania- y muestran cómo un joven de 18 años Vladislav Rosliakov dispara contra cada persona que se cruza en los pasillos del colegio.

El joven ingresó armado, detonó una bomba y en medio del caos se paseó disparando y matando a un total de 21 personas. El joven vestía una remera con la leyenda "odio", en un atentado que dejó además 40 heridos, y que culminó con su propio suicidio.

"Me decía que perdió la confianza en la gente cuando sus compañeros de clase comenzaron a humillarlo por no ser como los demás", manifestó una compañera del joven estudiante que habría tomado la extrema decisión víctima de bullying.

"Me dijo que quería vengar esas burlas (...) y que no quería seguir viviendo. Cuando aún nos comunicábamos, era bueno y atento, y me ayudó cuando me sentí mal. Era un buen amigo. Pero congeniamos ya que yo practico tiro y él también se dedicaba a lo mismo. Le gustaban las armas", aseguró la testigo en declaraciones a la cadena RT.com.

El 16 de marzo de 2014, Crimea y la ciudad de Sebastopol declararon su independencia de Ucrania, formando la República de Crimea, legitimados por Rusia, pero no por Estados Unidos y Ucrania. Con una participación de más del 80% de la población, una consulta popular definió la opción de adherirse a Rusia como la ganadora, con más del 96% de los votos.