Al menos 160 personas murieron el sábado en el sur de Nigeria después de que las vigas de metal de una iglesia cedieran y el tejado de metal ondulado se derrumbara sobre los feligreses, indicó el domingo un director de hospital. Las morgues locales estaban sobrepasadas y era probable que la cifra final de muertos fuera mucho mayor, señaló a Associated Press Etete Peters, del Hospital Universitario de Uyo.

La iglesia Reigners Bible seguía en construcción el sábado y los trabajadores habían subido el ritmo de trabajo para intentar terminarla a tiempo para la ceremonia del sábado en la que se ordenaba como obispo al fundador de la Iglesia, Akan Weeks, dijeron miembros de la congregación.

Fuente: Herald