La situación de la salud es caótica y el pueblo salió a las calles en Madrid. El Gobierno de la región que incluye a la capital española, liderado por Isabel Díaz Ayuso, del derechista Partido Popular (PP), el principal de la oposición a nivel nacional pretende reducir la atención hospitalaria gratuita.

La manifestación, apoyada por el gobierno del presidente Pedro Sánchez, se produce antes de una huelga anunciada para el 21 de noviembre, de médicos que protestan contra la “sobrecarga de trabajo”.

La marcha en defensa de "una sanidad 100% pública, universal y de calidad" y en contra la política sanitaria del Gobierno de Díaz Ayuso fue convocada por sindicatos y colectivos sociales y fue las más masivas de los últimos años en la capital española. 

El hecho recuerda lo que sucede en Argentina, donde Buenos Aires, la ciudad de mayor presupuesto del país, mantiene a los profesionales de la salud en pésimas condiciones laborales y con los edificios en mal estado. 

Bajo la consigna en Madrid "se manifiesta en apoyo de una sanidad pública y contra los planes de destruir los servicios de atención primaria", los manifestantes corearon las consignas. 

Díaz Ayuso busca precarizar la salud al anunciar videoconsultas y la telemedicina, además de potenciar el rol de las enfermeras para resolver los problemas de sanidad en la región de Madrid, la más rica de España. El pueblo por lo pronto le dijo masivamente que “no”.