Maduro dijo que el petróleo venezolano se cotizó a 48 dólares el barril, después de que en septiembre estaba en 95, una brusca y veloz baja que atribuyó a una "guerra planificada estratégicamente" por Estados Unidos "para destruir a Rusia, y también a Venezuela, recolonizarnos y destruir nuestra independencia y nuestra revolución".

"Con la caída de los precios del petróleo, el imperio nos está empujando a producir internamente", se quejó el mandatario, quien resaltó en una reunión con productores locales que "ni a Rusia ni a Venezuela le van a torcer el brazo, seguiremos impulsando un mundo pluripolar".

El gobernante indicó que el precio del barril petrolero venezolano ha bajado a la mitad desde septiembre, arrastrado por una caída ocasionada por la inundación del mercado con petróleo producido por el llamado método de "fracking", que -sostuvo- "fractura la corteza terrestre y contamina los manantiales naturales".

Maduro agregó que la caída de los precios petroleros y la "guerra financiera internacional" contra Venezuela son una "gran oportunidad para un gran cambio en 2015". "2015 será el año de un gran cambio económico, productivo, una gran transformación de la economía", pronosticó.

Y concluyó que su gobierno tiene los recursos para invertir en planes productivos el próximo año, sin importar el nivel que caigan los precios petroleros.